
Escucharla de día o durante las tardes calurosas de enero (mes de su cumpleaños) es levantarse con un nuevo rostro y sonreír con un pedacito de su corazón; es vivir en ese Move Over, ese “Try”, tratar con mayor ahínco para superar los obstáculos impuestos por los relojes y las tarjetas de marcación. Es un salir a enfrentar al mundo, sin importar el costo. Por una canción, el cielo, la gloria, el infierno y todo lo que conlleva una esperanza. Maybe.
Pero, las noches son especiales para ella. Allí está su fuerza, su poder. Todo juega a su favor: el recuerdo, la luna, las estrellas que brillan al mismo canto de los grillitos que también la acompañan en coro. A woman Left Lonely. Summertime.
Canta, diosa perla, para que los lamentos de amor sean más puros, más eternos. No hay rimbombancia ni firuletes. No hay falsedad. Tu alma grita a cada giro del vinilo y consigues ese efecto mágico: todo te acompaña, se maravilla, se obnubila, se silencia. Claro que confiamos mientras tu voz se convierte en la manito que nos guía hacia lo que no se mide, hacia lo que no se captura solo con palabras. No es un universo. Son infinitas. Buried Alive In The Blues, Pearl. Es tu verdad. Es nuestra verdad. Mercedes Benz.
Algunos no te amaron. Otros te odiaron, te pisotearon, pobre bichito de luz, niña monstruo como Pizarnik, espíritu gigante de nobleza y encanto, atormentada por las guerras internas que se entrelazan en caminos de piedra, sombras y mar. Cry Baby.
27 años y tu esencia se durmió con la suavidad del roce, el pinchazo que simula al delirio de las promesas dictadas a susurros, entre besos de los demonios y los ángeles. Te fuiste apagando, Litle Girl Blue, pequeña niña triste, mujer de magia que no se cansaba de pedir amor. Nosotros te amamos. No incurriremos en exégesis sobre tus canciones, pesares y sentires. Eso no se analiza, solo se describe, se siente, se vive. Decías que todos tenemos un fuego por dentro. Kozmic Blues.
Todos nos dormimos bajo el hechizo de tu blues sideral, bruja cósmica. Sos la perla, sos la reina del tiempo, sos viento que viaja en cada suspiro. Respiras, quieta. Ya no hay bolas ni cadenas. Ya no llores. Sos libre. Tu amor está allí. Canta. Sonríe. Descansa… Vive….Trust me.