
Last Night We Said A Great Many Things…
Rick Blaine To Ilsa Lund In Casablanca (1942).
Anoche nos dijimos muchas cosas grandiosas…frasecitas perdidas y reencontradas en su elocuencia…solamente para descubrirnos a pasos agigantados, sobre la oscuridad que nos mata y nos redime…recreando el eterno Ars Amandi de nuestro propio universo en un mágico recuento del sueño…en otra galaxia…en otro tiempo…
El vino se agota en la copa del placer…la mente retiene y aprehende horas sagradas…temblamos…hablamos…existimos…soñamos…somos…en una lluvia de encanto…
La brújula que nos reúne…nos nutre…nos retroalimenta en esa trayectoria de caricias y besos…noble esperando de lo que ansiábamos y hoy vivimos…just you and me…in silent way…between a shadow and the light of your smile…
Adorarte sin decirlo…solo sentirlo en códigos que se descifran y se autorreconstruyen a cada contacto, suavidad de felpa y terciopelo…lengua y desliz de las bocas de fuego…revolucionando a piacere a los cánticos del cielo. Miradas dormidas y sumidas en ensoñaciones…voces que resucitan el amor eterno. Sonreímos…agradecidos…
Exhaustos y exasperados, combatimos a los temores y los miedos con semillas de tilo y hojitas de menta, mientras la miel nos endulzaba las comisuras en un juego mágico de acierto y desacierto…las ansias por fundirnos dejaron marcas sublimes en la piel…
Asistimos gustosos y trémulos al concierto de nuestros cuerpos, sintiendo calores friolentos y friolentos calores, cuando todo parecía tan poco y a la vez mucho…roce que eriza…puentes que se elevan hasta llegar al centro de todo lo que late por siempre sin tristezas ni malos momentos. Nos veíamos…te veía…me veías…y la camaradería vibraba en una sonrisa dulce y cómplice.
Quería decirte más cosas grandiosas, algunas que pudieran sonarte familiares, otras que formarían parte de algunos cuentos de hadas, pero el amor de lechuza y lechuzo forjaba su nido y buscaba refugiarse entre las ramas de otoño. Amor, no es fácil revivir la palabrita tan cansada de caer por su propio peso. Quisiera que las horas, los días, los relojitos a cuerda de nuestras almas de arco iris evoquen pasajes de nuestros poemas favoritos mientras lo que sentimos nazca y renazca en el infinito.
Verte siempre…en el camino más próximo hacia las hendiduras que nos hacen y rehacen como seres de fe…sucumbir ante tu esencia en un silencio de estrellas, luna o lluvia etérea…toda la magia del let it be fluyendo en nuestros abrazos de luz y sombras, cósmicos rayitos de esperanza para los ángeles que brillan en su vuelo sin dolores ni enojos.
Diablitos…salvajes peregrinos de lo prohibido…exploradores y aventureros de puntos cardinales entre puntos suspensivos…norte a sur…marea y puerto…sal y azúcar…ecos como pies que se extrapolan y se entrelazan reinventando signos y promesas.
Sé que nos dijimos todo más allá de las palabras. Comunión y mancomunión de un café para dos. Viaje sublime del amor secreto, de los amantes secretos hambrientos. Nos matamos y nos revivimos en cada gemido, en cada gesto tierno de reacomodarnos el cabello o mordernos los labios…dándolo todo…sin mordazas o censuras…libres en el atardecer en plena noche…enamorados…entre ojitos, naricitas y jueguitos placenteros de los traviesos cronopios…